¡Feliz comienzo de semana familia! Hoy os traemos un artículo tan útil como interesante. Seguramente ya habréis comprobado que el bañador, aunque no lo parezca, es una prenda muy delicada. A esto hay que añadirle los factores agresivos a los que se enfrenta. La moda de baño tiene que convivir con el cloro de la piscina o la sal del mar, el sudor, las cremas solares…
Y todo esto provoca que acabemos renovando nuestros estilismos de verano año tras año. Especialmente, cuando no le prestamos toda la atención que deberíamos. Si te sientes identificada con esto, no te preocupes, ¡Te traemos unos consejos que te van a venir genial!
Hemos preparado una serie de trucos prácticos y sencillos para conservar las prendas de baño en buen estado. ¡Evita que ese bañador que tanto te gusta se estropee antes de tiempo!
Los expertos recomiendan lavar siempre el bañador antes de usarlo por primera vez
De esta manera, se consiguen fijar los colores y que dure más tiempo. Podréis lucir vuestra moda de baño favorita. En este aspecto también quedan incluidos los motivos de higiene. Cuando compras una prenda nueva, lo recomendable antes de su uso es lavarla.
Truco especial: sumerge la prenda en un poco de agua con sal antes de lavarlo. Conseguirás que los colores se desgasten menos por la exposición solar.
¡Mucho cuidado con la crema solar!
Estos productos suelen llevar compuestos que manchan nuestras prendas de baño. Por desgracia, seguro que ya has comprobado que son muy difíciles de quitar.
También deberás prestar atención a los bordillos de las piscina. ¡La piedra daña el tejido del bañador!
Un lavado después de cada uso… ¿Sí o no?
Este aspecto resulta fundamental. Es muy importante lavar los bañadores con agua fría en cuanto se llegue de la playa o la piscina. ¡Así eliminas el cloro y la sal!
¡Importante!: evita lavarlo con agua caliente, podría encoger o desteñir la prenda. Además, una vez se haya lavado, deberás escurrir el exceso de agua de la prenda. ¡No lo arrugues demasiado para no deformarlo!
¿Cuál es la mejor manera de secar mi bañador?
Sin lugar a dudas, la mejor forma es al aire libre. Sin embargo, mucha gente lo tiende al sol… ¡Error! Deberás extenderlo a la sombra para evitar que el sol aclare el color. ¡Y por supuesto, nada de secadora ni plancha!
¡Hasta pronto verano!
Cuando se acabe la temporada estival, lo ideal es lavar el bañador a mano con agua tibia. Además, si tienes posibilidad, ciérralo en una bolsa de manera hermética. Otra opción sería en una caja y el bañador envuelto en papel. ¡Es la mejor protección contra la humedad!
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